top of page

Historia de un libro de recetas

Actualizado: 2 ene 2020


Hace un año, por estas fechas, Jaume Roca me llamaba para contarme que iban a hacer un libro con las recetas de su padre y que quería que yo hiciera las fotos. Yo no lo dudé, o bueno sí... un poco, pero después de decirle, “vale, pero ten en cuenta que yo no he hecho nunca un libro de recetas” (haciendo así una desastrosa autopromoción de la que sólo te salva que tu amigo confíe mucho en ti) me lancé a la aventura de poner imagen a la deliciosa y tradicional cocina de Biel Felip.

Y allí estaba yo, 4 meses después, cargada con todos mis aparatejos fotográficos (había más trastos que ropa en mi maleta), en Mallorca dipuesta a darlo todo y aterrorizada por si no era capaz de captar con la cámara el sabor y la tradición de los platos que allí me iban a presentar.

Pero a veces la magia sucede y lo único que no tienes previsto y no controlas es lo que mejor se adapta a tus circunstancias y hace que el trabajo resulte fácil, tenga luz y salga sólo. La magia esta vez ocurrió cuando Jaume me llevó al lugar dónde él tenía pensado hacer las sesiones de fotos. Y allí que iba yo cargada con mis flashes, mis reflectores, cartulinas blancas, negras… cuando me encuentro en una antigua casona mallorquina semiabandonada, llena de vajillas antiguas, damajuanas, maderas con historia, una cocina de las de antaño y un gigantesco patio presidido por un majestuoso árbol que generaba un magnífico juego de luces que me enamoró al instante. Y fue en ese instante cuando me relajé. Solté mi flash, que no volví a tocar hasta meterlo de nuevo en la maleta, y mis reflectores, y supe que era el lugar perfecto, con la luz perfecta y los materiales perfectos para cada una de las fotografías. Nada podía salir mal en aquel lugar.

Y allí pasamos unos cuantos días, revolviendo entre viejos ajuares para buscar el atrezzo perfecto para cada receta. Descubriendo para cada plato el rincón de la casa dónde mejor lucían. Escapándonos una mañana al mar buscando el azúl del mediterráne como fondo para los platos más marineros, mientras los turistas y bañistas observaban a esos dos locos chiflados que estaban tirados en el suelo sacando fotos de platos.

El resultado está ahora en un libro de recetas muy especial llamado "La Cuina Mallorquina de Biel Felip". Especial porque está hecho con todo el amor y la admiración de unos hijos a sus padres, que quisieron que tantos años de trabajo y buen hacer no se perdieran en el olvido y quedarán reflejados en palabras e imágenes para siempre. Especial porque además para cada receta Felip Munar se sentó a escribir una glosa mallorquina y éstas hacen que éste no sea un libro de recetas cualquiera.

Por mi parte sólo me queda estar agradecida a Jaume por la confianza ciega y a toda la familia Roca Serra por acogerme con tanto cariño esos días que anduve por Mallorca. Trabajamos, sí, pero los disfrutamos mucho más.

Nota: Libro se puede adquirir en Amazon (dejo aquí enlace directo "Comprar libro" ), de momento sólo está en catalán, aunque ojalá pueda estar en breve en castellano. También podéis ver algunas de las fotos de las recetas pinchando aquí

98 visualizaciones0 comentarios
bottom of page